Se acerca la temporada navideña, y las principales bolsas de valores a nivel mundial están entrando gradualmente en modo de cierre, con una liquidez claramente reducida. Este ambiente previo a las fiestas ha dado lugar a características típicas de toma de ganancias en el precio del oro.

Esta mañana, el precio del oro alcanzó momentáneamente los 4525, cerca de su máximo reciente, mostrando un buen impulso, pero luego enfrentó ventas por parte de los inversores que prefieren asegurar ganancias, y el precio retrocedió. Durante la sesión asiática, incluso cayó rápidamente hasta el soporte en 4471, aunque se estabilizó bastante rápido. En la sesión europea, el mercado entró en un rango estrecho de oscilación entre 4480 y 4500, con los compradores y vendedores en equilibrio temporal.

**Algunos factores clave que impulsan la tendencia:**

El efecto de las vacaciones reduce directamente la actividad de trading. Durante la noche, los mercados internacionales cerraron progresivamente, y a las 2:45 de esta madrugada también cerrarán anticipadamente, con el cierre total de operaciones mañana. Con tan pocas ventanas de negociación, el capital no puede generar un impulso sostenido, por lo que la volatilidad naturalmente se limita.

Por otro lado, los fundamentos son mixtos. Los datos del PIB del tercer trimestre en EE. UU. fueron más fuertes de lo esperado, ejerciendo una presión a corto plazo sobre el precio del oro. Pero por otro lado, las expectativas de una reducción de tasas en la Fed para 2026 están en aumento, y el conflicto geopolítico entre EE. UU. y Venezuela sigue fermentándose. Todo esto proporciona un soporte sólido para el precio del oro y evita que la corrección sea demasiado profunda.

Desde el punto de vista técnico, la tendencia alcista aún no ha sido rota, y el precio del oro se mantiene firmemente por encima de la media clave. Sin embargo, el RSI de 14 días ya ha entrado en zona de sobrecompra, lo que indica que a corto plazo es necesario digerir las ganancias mediante consolidaciones, acumulando energía para la próxima ola de subida. Esta fase de consolidación, en realidad, representa una oportunidad para los inversores con visión a largo plazo que mantienen una postura alcista.