¿Has estado pensando que solo se puede ganar comprando barato y vendiendo caro? En realidad, no es así. Las opciones, este instrumento financiero derivado, te permiten obtener beneficios en mercados bajistas, alcistas e incluso en mercados laterales. Pero el problema es que muchas personas se asustan por la complejidad de las opciones. Hoy te llevaré a aprender rápidamente.
¿Qué son exactamente las opciones?
En pocas palabras, la opción (también llamada opción de compra o venta) es un contrato que te da un “derecho”, pero no la obligación, de comprar o vender un activo a un precio fijo en el futuro. Este activo puede ser acciones, monedas, índices, commodities, incluso contratos de futuros.
¿Por qué usar opciones? Tres ventajas clave:
Controlar grandes activos con poco dinero — Solo necesitas pagar un pequeño margen para controlar un volumen de activos mucho mayor que tu inversión
Se puede jugar en cualquier tendencia — Ganar en mercados alcistas, bajistas o en consolidación, con diferentes estrategias
Herramienta de cobertura de riesgos — ¿Tienes acciones y temes que bajen? Compra una opción put para asegurarte
Pero esto también significa que necesitas la aprobación de tu corredor. Antes de comenzar a operar con opciones, debes completar un acuerdo de opciones, para que evalúen tu capacidad financiera, experiencia en trading y conocimientos sobre opciones.
Cinco términos clave que debes conocer sobre opciones
Opción de compra (Call) — Derecho a comprar un activo a un precio acordado
Opción de venta (Put) — Derecho a vender un activo a un precio acordado
Prima — El costo que pagas al vendedor de la opción
Precio de ejercicio — El precio acordado para comprar o vender el activo
Fecha de vencimiento — La fecha en que la opción expira; después de esta, tus derechos caducan
Seis puntos importantes para entender un contrato de opción
Al leer cotizaciones de opciones, no te asustes. Cada contrato incluye estos elementos básicos:
Activo subyacente — Lo que quieres comprar o vender (por ejemplo, una acción)
Tipo de operación — Comprar una opción de compra o de venta
Precio de ejercicio — El precio fijo de compra o venta
Fecha de vencimiento — La última fecha en que puedes ejercer tu derecho; elegir mal esta fecha puede afectar tu estrategia
Precio de la opción — Lo que pagarás al vendedor
Cantidad de acciones por contrato — En las opciones de EE. UU., cada contrato representa 100 acciones, por lo que el costo total de la opción = precio de la opción × 100
Cuatro formas principales de usar opciones, con riesgos y beneficios muy diferentes
Las opciones se dividen en compra y venta, y en compra de opciones y venta de opciones, formando cuatro estrategias básicas.
1. Comprar una opción de compra — Expectativa de subida
Compras una opción de compra, como si fuera un cupón de descuento. Supón que compras una opción de compra de Tesla (TSLA.US), cuando el precio de la acción era 175 dólares, la prima de la opción 6.93 dólares, y el precio de ejercicio 180 dólares. Pagas 693 dólares (6.93 × 100).
Si el precio se mantiene por debajo de 180 dólares, simplemente no ejercitas la opción y pierdes esos 693 dólares, sin más pérdidas. Pero si el precio sube a 200 dólares, puedes comprar a 180 y vender a 200, ganando la diferencia. Cuanto más alto suba, más ganas. Esa es la estrategia de comprar una opción de compra.
2. Comprar una opción de venta — Expectativa de caída
En esta estrategia, compras el derecho a vender a un precio más barato. Cuanto más baja caiga la acción, más ganas. La lógica es la misma: si el precio no cae como esperabas, solo pierdes la prima pagada. El riesgo está limitado, y esa es una ventaja de la estrategia de compra.
3. Vender una opción de compra — Juego peligroso
Las opciones son un juego de suma cero: si el comprador gana, el vendedor pierde. Si vendes una opción de compra sin tener las acciones subyacentes, asumes un riesgo ilimitado. Por ejemplo, vendes una opción y cobras 100 dólares de prima; si la acción se dispara, tendrás que comprar a un precio alto y vender a un precio bajo al comprador, y las pérdidas pueden superar ampliamente esos 100 dólares, esto es, un escenario de “ganar poco, perder mucho”.
4. Vender una opción de venta — Cobrar la prima y asumir riesgos
Esperas que el precio suba o se mantenga estable, así conservas la prima recibida al vender la opción. Pero si el precio cae mucho, por ejemplo, si vendes una opción put con precio de ejercicio 160 dólares y prima de 3.61 dólares, y la acción cae a cero, tendrás que comprar 100 acciones a 160 dólares cada una, que ahora no valen nada, con una pérdida real de 15,639 dólares (160 × 100 - 361). Vender opciones implica riesgos mucho mayores que comprarlas, no lo olvides.
¿Cómo evitar arruinarte con las opciones?
Cuatro consejos para gestionar el riesgo en opciones:
Evitar tener una posición netamente corta
No vendas demasiadas opciones. La venta de opciones genera una posición netamente corta, con pérdidas ilimitadas, mucho más peligrosa que comprar opciones. Si usas varias estrategias combinadas, revisa si tienes una posición netamente larga (más compras que ventas), neutral (igual cantidad) o netamente corta (más ventas que compras). Si descubres que accidentalmente te has convertido en una posición netamente corta, compra algunas opciones para equilibrar, así sabrás cuánto puedes perder como máximo.
Controla el tamaño de tus apuestas
No pongas todo tu capital en una sola estrategia. Si tu estrategia requiere pagar prima por adelantado, prepárate para que esa inversión pueda irse a la basura. Las opciones pueden amplificar tanto las ganancias como las pérdidas, así que no bases el tamaño de tu operación en el margen, sino en el valor total del contrato.
Diversifica tus inversiones
No pongas todo tu dinero en opciones de una sola acción, índice o commodity. Crea una cartera diversificada para reducir riesgos específicos.
Establece límites de pérdida
Para estrategias con posición netamente corta, el stop loss es fundamental, porque las pérdidas pueden ser ilimitadas. En cambio, en estrategias con posición netamente larga o neutral, los límites de pérdida no son tan estrictos, ya que la pérdida máxima ya está definida.
¿Qué elegir: opciones, futuros o CFDs?
Los tres instrumentos derivados tienen sus ventajas. Las opciones son más difíciles de entender y reaccionan lentamente a cambios pequeños en el activo subyacente. Si quieres aprovechar oportunidades a corto plazo en rangos estrechos y tienes tolerancia al riesgo, los futuros o CFDs pueden ser más adecuados.
Dimensión
Opciones
Futuros
CFDs
Explicación sencilla
Pagar poco para tener el derecho de comprar o vender a un precio fijo en el futuro
Acuerdo con otra parte para comprar o vender en el futuro a un precio fijo, con obligación de cumplir
Intercambio de la diferencia de precio del activo, sin compra o venta real
Derechos y obligaciones
El comprador tiene derecho, pero no obligación
Ambas partes deben cumplir
El vendedor tiene obligación de pagar la diferencia
Activo subyacente
Acciones, índices, commodities, etc.
Acciones, commodities, divisas, etc.
Acciones, commodities, divisas, criptomonedas, etc.
Vencimiento
Tiene
Tiene
No tiene
Apalancamiento
Moderado (20-100 veces)
Bajo (10-20 veces)
Alto (hasta 200 veces)
Monto mínimo
Cientos de dólares
Desde miles de dólares
Decenas de dólares
Comisiones
Sí
Sí
No
Requisito mínimo
Alto
Alto
Bajo
La última frase
Las opciones son una herramienta muy poderosa, pero también muy peligrosa. Dominar las estrategias de opciones es solo el primer paso; la verdadera prueba es la disciplina en la ejecución: gestionar riesgos, diversificar y poner límites de pérdida. Y no olvides que, incluso con las mejores herramientas, solo se gana cuando tu juicio es correcto. Por eso, hacer una buena investigación siempre será la forma más segura de invertir.
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Guía de estrategias con opciones: Entiende las estrategias de compra y venta, evita la trampa de pérdidas ilimitadas
¿Has estado pensando que solo se puede ganar comprando barato y vendiendo caro? En realidad, no es así. Las opciones, este instrumento financiero derivado, te permiten obtener beneficios en mercados bajistas, alcistas e incluso en mercados laterales. Pero el problema es que muchas personas se asustan por la complejidad de las opciones. Hoy te llevaré a aprender rápidamente.
¿Qué son exactamente las opciones?
En pocas palabras, la opción (también llamada opción de compra o venta) es un contrato que te da un “derecho”, pero no la obligación, de comprar o vender un activo a un precio fijo en el futuro. Este activo puede ser acciones, monedas, índices, commodities, incluso contratos de futuros.
¿Por qué usar opciones? Tres ventajas clave:
Pero esto también significa que necesitas la aprobación de tu corredor. Antes de comenzar a operar con opciones, debes completar un acuerdo de opciones, para que evalúen tu capacidad financiera, experiencia en trading y conocimientos sobre opciones.
Cinco términos clave que debes conocer sobre opciones
Seis puntos importantes para entender un contrato de opción
Al leer cotizaciones de opciones, no te asustes. Cada contrato incluye estos elementos básicos:
Cuatro formas principales de usar opciones, con riesgos y beneficios muy diferentes
Las opciones se dividen en compra y venta, y en compra de opciones y venta de opciones, formando cuatro estrategias básicas.
1. Comprar una opción de compra — Expectativa de subida
Compras una opción de compra, como si fuera un cupón de descuento. Supón que compras una opción de compra de Tesla (TSLA.US), cuando el precio de la acción era 175 dólares, la prima de la opción 6.93 dólares, y el precio de ejercicio 180 dólares. Pagas 693 dólares (6.93 × 100).
Si el precio se mantiene por debajo de 180 dólares, simplemente no ejercitas la opción y pierdes esos 693 dólares, sin más pérdidas. Pero si el precio sube a 200 dólares, puedes comprar a 180 y vender a 200, ganando la diferencia. Cuanto más alto suba, más ganas. Esa es la estrategia de comprar una opción de compra.
2. Comprar una opción de venta — Expectativa de caída
En esta estrategia, compras el derecho a vender a un precio más barato. Cuanto más baja caiga la acción, más ganas. La lógica es la misma: si el precio no cae como esperabas, solo pierdes la prima pagada. El riesgo está limitado, y esa es una ventaja de la estrategia de compra.
3. Vender una opción de compra — Juego peligroso
Las opciones son un juego de suma cero: si el comprador gana, el vendedor pierde. Si vendes una opción de compra sin tener las acciones subyacentes, asumes un riesgo ilimitado. Por ejemplo, vendes una opción y cobras 100 dólares de prima; si la acción se dispara, tendrás que comprar a un precio alto y vender a un precio bajo al comprador, y las pérdidas pueden superar ampliamente esos 100 dólares, esto es, un escenario de “ganar poco, perder mucho”.
4. Vender una opción de venta — Cobrar la prima y asumir riesgos
Esperas que el precio suba o se mantenga estable, así conservas la prima recibida al vender la opción. Pero si el precio cae mucho, por ejemplo, si vendes una opción put con precio de ejercicio 160 dólares y prima de 3.61 dólares, y la acción cae a cero, tendrás que comprar 100 acciones a 160 dólares cada una, que ahora no valen nada, con una pérdida real de 15,639 dólares (160 × 100 - 361). Vender opciones implica riesgos mucho mayores que comprarlas, no lo olvides.
¿Cómo evitar arruinarte con las opciones?
Cuatro consejos para gestionar el riesgo en opciones:
Evitar tener una posición netamente corta
No vendas demasiadas opciones. La venta de opciones genera una posición netamente corta, con pérdidas ilimitadas, mucho más peligrosa que comprar opciones. Si usas varias estrategias combinadas, revisa si tienes una posición netamente larga (más compras que ventas), neutral (igual cantidad) o netamente corta (más ventas que compras). Si descubres que accidentalmente te has convertido en una posición netamente corta, compra algunas opciones para equilibrar, así sabrás cuánto puedes perder como máximo.
Controla el tamaño de tus apuestas
No pongas todo tu capital en una sola estrategia. Si tu estrategia requiere pagar prima por adelantado, prepárate para que esa inversión pueda irse a la basura. Las opciones pueden amplificar tanto las ganancias como las pérdidas, así que no bases el tamaño de tu operación en el margen, sino en el valor total del contrato.
Diversifica tus inversiones
No pongas todo tu dinero en opciones de una sola acción, índice o commodity. Crea una cartera diversificada para reducir riesgos específicos.
Establece límites de pérdida
Para estrategias con posición netamente corta, el stop loss es fundamental, porque las pérdidas pueden ser ilimitadas. En cambio, en estrategias con posición netamente larga o neutral, los límites de pérdida no son tan estrictos, ya que la pérdida máxima ya está definida.
¿Qué elegir: opciones, futuros o CFDs?
Los tres instrumentos derivados tienen sus ventajas. Las opciones son más difíciles de entender y reaccionan lentamente a cambios pequeños en el activo subyacente. Si quieres aprovechar oportunidades a corto plazo en rangos estrechos y tienes tolerancia al riesgo, los futuros o CFDs pueden ser más adecuados.
La última frase
Las opciones son una herramienta muy poderosa, pero también muy peligrosa. Dominar las estrategias de opciones es solo el primer paso; la verdadera prueba es la disciplina en la ejecución: gestionar riesgos, diversificar y poner límites de pérdida. Y no olvides que, incluso con las mejores herramientas, solo se gana cuando tu juicio es correcto. Por eso, hacer una buena investigación siempre será la forma más segura de invertir.